El ladrón de compresas – Sergio G.Ros

S. Jimenez, una estudiante universitaria de veinte años de edad, ha sido secuestrada. Un viejo compañero de la muchacha recibe un mensaje del móvil de S., se trata de una imagen turbia que la policía científica examina, en el que se aprecia una vieja Tabla Periódica de los elementos. El comisario Cervantes decide poner a la agente S. R. en el caso, hasta ese instante dirigido por el pedante policía J. Mulero. S. tiene, por si fuera poco, otro encargo del comisario: solicitar ayuda a Vargas, un renombrado detective, viejo amigo suyo.
Poco después, la comisaría de Pedreira recibe la visita del conjunto de investigación del subinspector Garnero, un hombre ambicioso y con escasos escrúpulos, que toma de forma inmediata las bridas del caso y todo el estrellato mediático. Su conjunto aporta, no obstante, un nuevo y retorcido punto de vista al mismo. El secuestrador de S. lleva tiempo en el punto de de mira del equipo de Garnero. Se trata de un potencial asesino en serie, un sicópata con una retorcida peculiaridad, una nosología llamada olfactofilia, un deseo sexual apremiante relacionado con el fragancia de la transpiración, que le hace hurtar las compresas de las víctimas ya antes de matarlas.

El ladrón de compresas – Sergio G.Ros